Nuestro cuerpo reacciona automáticamente en todo momento y lugar, pero no somos conscientes debido a que las reacciones son congruentes con el momento y las circunstancias presentes. Un ejemplo de ello es, cuando paseamos por un barrio conflictivo a horas intempestivas y vemos a un grupo de jóvenes que se acercan, tu corazón y respiración se acelerarán, y los músculos se tensarán para huir en caso de que fuera necesario. En este caso, no sentiremos que nuestro cuerpo esté haciendo algo fuera de lugar, pues es congruente con la situación.
La ANSIEDAD es una respuesta automática corporalmente sentida (taquicardia, respiración acelerada, sudoración, tensión muscular, etc.) que te sobresalta e incómoda debido a que la reacción corporal no es congruente con el momento vivido; por lo que podrás sentir descontrol y miedo por lo extraño de la situación, pudiendo tener incluso un ATAQUE DE PÁNICO. Es posible que tu caso sea, que tengas un miedo intenso a un animal, objeto o situación que no entrañe ningún peligro presente, en este caso estamos hablando de FOBIAS, que serán el resultado de una experiencia traumática pasada sin procesar o ESTRÉS POSTRAUMÁTICO.
En otras ocasiones la ansiedad se generalizará a casi cualquier situación o acontecimiento de forma, dando lugar a una preocupación generalizada o TRASTORNO DE ANSIEDAD GENERALIZADA (TAG).
Por último, la ansiedad (síntomas físicos) se pueden ocultar detrás de una obsesión (pensamiento recurrente) y/o una compulsión (conducta que disminuya el malestar físico y emocional) causando un trastorno añadido, el TRASTORNO OBSESIVO COMPULSIVO O TOC.
La ansiedad suele ser debida a una tensión o estrés emocional sin procesar. Es la expresión de tu cuerpo ante la necesidad de atención a tus emociones, tensiones y traumas no resueltos y no procesados.
Una pista de que puedes estar cargando con emociones y estrés puede ser cuando se tienen TRASTORNOS DEL SUEÑO.
ATAQUE DE PÁNICO: es cuando un ataque de ansiedad se ve incrementado por el miedo de la situación vivida de descontrol. En estos casos los síntomas físicos se verán incrementados en intensidad y número (palpitaciones, falta de respiración, opresión torácica, mareos, escalofríos, contracturas, hormigueos) sumándose síntomas psicológicos (pérdida de control, parecer que uno se está volviendo loco o que se va a morir, e incluso desconexión con la realidad presente). El miedo a que se repitan estos síntomas en otro lugar que no sea nuestro refugio seguro (tu hogar) hará que que en muchas ocasiones tengas reparos a salir de casa, sumándose a la ansiedad y a los ataques de pánico, la AGORAFOBIA (miedo intenso a salir o a exponerse ante espacios abiertos o cerrados fuera de casa)
ESTRÉS POSTRAUMÁTICO: la causa suele ser una experiencia en la que sentiste que tu vida o la de otros podrían estar corriendo un grave peligro, por lo que evitarás ciertas circunstancias que a nivel consciente o subconsciente te hagan disparar los síntomas y recordar el acontecimiento traumático.
TRASTORNO OBSESIVO COMPULSIVO (TOC): aparece como mecanismo de defensa ante los síntomas físicos de ansiedad. En Psicoanálisis se habla de proyección, cuando trasladas tu problema hacia un objeto, cosa, lugar, persona o situación, con el fin de aliviar inconscientemente el síntoma que no estás logrando solucionar, ver o entender. Por lo que si sufres un TOC de orden, de limpieza, de contaminación, o cualquier otro, muy probablemente tengas que atender antes la ansiedad que hay de base.
TRASTORNOS DEL SUEÑO: es cuando tenemos dificultades para conciliar o mantener el sueño normal y reparador debido a una dificultad o trastorno psicológico.
La ansiedad en todas sus formas puede ser tratada mediante terapia online o presencial, siendo la mejora muy destacable y visible a lo largo de las sesiones.